No es que este tipo de búho, la especie conocida como Otus brookii brookii, estuviera extinta, pero es sumamente raro verla y la última vez que fue avistada fue hace más de un siglo, para ser exactos hace 125 años, en la isla de Borneo. Pero hace poco este búho asiático fue fotografiado por el ecologista del Centro Smithsonian de Aves Migratorias, Andy Boyce.
Esto sucedió en la densidad de la selva húmeda de Malasia. Luego de pasar más de 5 años investigando el área, este investigador consiguió captar al búho al interior del parque natural de la zona, en colaboración con los residentes locales.
“Si no lo documentamos en ese mismo momento, esta ave podría desaparecer de nuevo quién sabe cuánto tiempo. Fue una progresión de emoción realmente rápida. Estaba muy nervioso. Mientras intentaba llegar. Tenía la esperanza de que el pájaro todavía estuviera allí. Sentí una gran emoción y un poco de incredulidad cuando vi por primera vez y me di cuenta de lo que era”, dijo Boyce para National Geographic.
Se sabe que en la zona hay baja densidad de población de estos búhos, y esto dificulta enormemente la investigación científica, y por ello su registro se queda rezagado.
Es, además, complicado estudiar la especie, ya que nunca antes se había capturado un espécimen similar, y ni siquiera se cuenta con muestras de ADN que proporcionen más información al respecto.
Sobre este búho, tan exótico y hermoso, se le admira desde siempre por sus enormes ojos naranjas, los cuales se encienden, como dos aros de fuego cuando llega la noche.